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Foto del escritorCarlos Marín

El futuro de los pagos digitales: cómo las soluciones nativas de la nube están transformando la industria

La transformación del procesamiento de pagos ha cobrado protagonismo con la llegada de las soluciones nativas de la nube, que son el futuro de las transacciones digitales. En un entorno cada vez más digitalizado, estas plataformas no solo ofrecen agilidad y escalabilidad, sino que también facilitan la integración regional y global. Además, elevan indicadores clave como la tasa de aprobación, el nivel de fraude y la disponibilidad a niveles sin precedentes. Al adoptar soluciones nativas de la nube, las empresas pueden beneficiarse de tecnologías avanzadas que maximizan la eficiencia de las transacciones, minimizan el fraude y brindan análisis de datos en tiempo real. Esto permite una respuesta ágil a las oportunidades del mercado, estableciendo un estándar renovado en la industria de los pagos digitales.


La revolución de los pagos nativos de la nube

Las soluciones de pago digital han transformado radicalmente la gestión de transacciones en las empresas. La adopción de plataformas nativas de la nube permite a las organizaciones ofrecer métodos de pago ágiles y escalables, adaptados a las demandas del mercado global. Según el “ World Payments Report 2022 ” de Capgimini, las plataformas nativas de la nube han demostrado ser un factor crucial en la transformación del ecosistema de pagos digitales, permitiendo un crecimiento anual compuesto del 19,4% en las transacciones de pago digital entre 2020 y 2025. Estas soluciones permiten el procesamiento de pagos en tiempo real, como PIX y sus variantes regionales, soportando un amplio espectro de métodos, desde tarjetas de crédito, débito y prepago de redes como Mastercard, Visa, Amex y Diners, hasta pagos con criptomonedas o métodos alternativos como el efectivo.



Inteligencia artificial en los pagos digitales

Las tecnologías avanzadas como la IA integrada en estas plataformas aumentan la eficiencia y reducen el fraude al aprovechar el análisis de datos en tiempo real y la tokenización de la red. Esto no solo mejora las tasas de aprobación, sino que también optimiza la experiencia del usuario final. Al implementar soluciones de pago digital, las empresas están mejor posicionadas estratégicamente para captar nuevas oportunidades de mercado y satisfacer las expectativas de los consumidores modernos. McKinsey, en su Informe de pagos globales de 2021, destaca que las soluciones de pago digital mejoran las tasas de aprobación en un 10 % al integrar capacidades de IA para la detección de fraudes, lo que da como resultado una experiencia de usuario más fluida y segura.

“El uso de infraestructuras nativas de la nube en el procesamiento de pagos representa un cambio de paradigma en la industria. Permiten una escalabilidad y flexibilidad sin precedentes que simplemente no se puede obtener con soluciones locales. Estas plataformas pueden adaptarse rápidamente a las demandas del mercado y ofrecer actualizaciones sin problemas, lo cual es vital en un entorno donde la innovación es constante y la competencia es feroz”. — Carlos Marín, CEO de Akua y experto en finanzas integradas e infraestructura.

Eficiencia de las transacciones

La eficiencia de las transacciones es un elemento clave para el éxito de las soluciones de pago digitales actuales. Las plataformas nativas de la nube permiten un procesamiento rápido y confiable, lo que resulta en una experiencia superior para el cliente y mayores tasas de aceptación de pagos. Mediante el uso de tecnología avanzada, estas plataformas son capaces de gestionar más de mil transacciones por segundo, algo esencial para operaciones de gran volumen. De hecho, el informe “Creación de una plataforma de pago nativa de la nube” de Gartner revela cómo las organizaciones que adoptan plataformas de pago nativas de la nube experimentan una reducción del 87% en el tiempo de inactividad del sistema, lo que es fundamental para mantener la continuidad del negocio y la satisfacción del cliente. El uso de inteligencia artificial y análisis en tiempo real permite a las empresas optimizar cada transacción, identificando y mitigando de forma proactiva el riesgo de fraude. Además, la integración directa con las redes de pago globales disminuye la latencia en la aprobación de transacciones, lo que garantiza menos interrupciones y tiempos de espera para los clientes.


En un entorno donde cada segundo cuenta, la eficiencia de las transacciones no solo mejora la satisfacción del cliente, sino que también maximiza los ingresos al reducir las pérdidas por fraude y mejorar la precisión del procesamiento.

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